Que mala educación

Todavía no pasa un mes y ya el gobierno el PAN se deshace en payasadas, traspiés, remiendos verbales y chismes. Increíbles, por lo desatinados en este momento tan cargado políticamente son los ataques al sector educativo, periodístico y cultural.

Al ver los recortes de Calderón, en educación especialmente, no podemos
comprenderlos. Los panistas a menudo se las dan de eficientes,"ganadores", honestos, diligentes. Pero ahí muchas veces lo que se comprueba es la estrechez de miras, la tendencia al autoengaño, la ignorancia rotunda y la ceguera ante las condiciones de un país del que casi siempre parecen avergonzarse. ¿Quién puede entender qué diablos piensan estas personas? ¿Cómo pueden atentar contra toda una generación de jóvenes que según los datos y pronósticos demográficos verá una mayor competencia por los puestos de trabajo y las oportunidades de supervivencia?

La educación es uno de los principales problemas sociales de México. El deterioro comenzó en el sexenio de Salinas, y la gravedad del problema continuó escondida durante el sexenio de Zedillo porque el presidente--que fungio como secretario de educación--podía ser cuestionado. Recordemos el estudio sobre educación enterrado que dejaba a México en pésimo lugar internacional, abajo incluso de Cuba. El foxismo se dió cuenta y se hizo muy poco a pesar del e-méxico y demás sueños cyberpunks. Eso sí, al llegar la hora de la verdad electoral su salvación fue aliarse con parte importante del problema educativo: la dirigencia y manejos de Elba Esther Gordillo. A ella parece haberse cedido hoy la subsecretaría respectiva en persona de su yerno. No puede ser que estas propuestas de Calderón sean aprobadas.

Desde el punto de vista de la efectividad capitalista--si es que uno quisiera darles por su lado--abandonar al grueso de la población a su suerte en el rubro educativo es un error catastrófico para el futuro de una economía. Y lo es cada vez más en el mundo actual. La torpeza de la derecha en este asunto se ha constatado con el escaso apoyo al desarrollo científico durante el sexenio de Fox--a mi juicio uno de los errores más graves del sexenio. Para los siguientes seis años parece que la ciencia también se las verá negras. La mentalidad "empresarial" de la mayoría de los panistas es el producto de algunos cursos de capacitación y la lectura superficial de libros de autoayuda, todo aquello que representa la decadencia cultural del nuevo capitalismo. Muchos panistas a todas luces sufren de gringuitis (querer ser estadounidenses). Viven encandilados por una sociedad compleja y rica como es la norteamericana, destilando y absorbiendo precisamente lo más nocivo (que es bastante) como si se tratara de un bálsamo precioso. Abrazan ciegamente la teología del libre mercado (el método se reduce a unas cuantas recetas) y lo defienden como si de ello dependiera su propia vida. Nada del pragmatismo, el esceptcismo, la disciplina y la eficiencia del éxito americano fluye por las venas de los derechistas ñoños que son nuestros "líderes". Como ejemplo tenemos a ese enano intelectual de Calderón, quien aparentemente planea guiar de la mano a una masa de ignorantes hacia el éxito a base de pura actitud "ganadora".

En el caso del diputado Padilla Orozco y su desplante en contra de la UNAM (y en defensa de los recortes a la educación superior) el asunto es muy lamentable. Los comentarios son casi una cristalización del fanatismo por la desaparición del estado de bienestar y su correspondiente estupidez. Queda claro que la fanfarronería del diputado no tiene cabida en una discusión seria de la educación superior en México. Yo recuerdo haber visto en la t.v. que el mismo candidato panista tenía en campaña opiniones similares, ¿o me equivoco? Espero que realmente se recapacite en este aspecto, porque en este rubro el pais se juega su viabilidad y mucho más.

En México hay persecuciones y muertes de periodistas que prenden otro foco rojo en nuestro maltrecho orgullo nacional. Gran parte de este problema lo causan los cárteles del narco, pero también los gobiernos locales. El gobierno federal es un poco más sutil, pero al parecer a veces tambien recurre a la coerción. Ultimamente, uno de los periodistas radiofónicos más importantes del país--José Gutiérrez Vivó--denunció la actitud adversa del panismo contra su persona, citando una entrevista que tuvo con el presidente Fox, en la cual le reclamaba ser perredista (afiliación que negó rotundamente) y hasta lo amenenazó veladamente. El periodista ha acusado al gobierno de no aplicar la justicia en su pleito con Radio Centro, cuyo desacato al laudo internacional tiene a Monitor en problemas y lo ha obligado a salir de la frecuencia modulada. Gutiérrez Vivó también ha mencionado el retiro de publicidad gubernamental. Nos preguntamos si este tipo de sucesos forman parte de la mano firme que según el PAN se exige del gobierno. A la hora de presumir libertades son muy buenos, excepto cuando les afecta directamente.

Ya para terminar, la mala noticia de los recortes a la cultura. Es cierto que es más importante apoyar la educación, la agricultura y la ciencia. Pero descuidar el apoyo a la cultura es también profundamente nocivo. Para empezar, lo más probalbe es que con ello se genere un estancamiento del sector, que, como fue demostrado no hace tanto, es un sector productivo. Esto es incomprensible en el momento en que los productores culturales apenas está adaptándose a las condiciones del libre mercado y aún así logran una mayor visibilidad mundial en varios rubros (cine, artes visuales, literatura, etc.) Hay gente que piensa que se trata de una venganza contra la cultura que en su mayoría es de izquierda. ¿Si?

La cultura mexicana es todo el conjunto de mensajes, costumbres, artes, procesos, etc. que viven los mexicanos. Se llama "cultura" en México a aquellos aspectos de la cultura mexicana que por su mayor calidad y excepción quedan fuera de los estrechos parámetros de la cultura de masas, en general a una selección arbitraria de prácticas que son minoritarias. Es cierto que no todos disfrutan de esta "cultura". Pero esta minoría es importante porque a través de ella se estimula la heterogeneidad y la creatividad en toda la sociedad. Y no sólo se trata de izquierdas o derechas. El apoyo del estado es necesario porque en un país de iletrados como el nuestro (menos del 2% lee al menos un libro al año) es preciso defender un poco aquellas expresiones más variadas y complejas para evitar la uniformidad y el deterioro intelectual que promueve un duopolio televisivo excesivamente protegido y un sector educativo ineficiente, por no abundar en el caso de una iglesia hegemónica siempre adversa al pensamiento.

A largo plazo, un recorte así es terrible para toda la cultura en su conjunto, y también puede ser que así se frene el crecimiento económico nacional. El problema suele verse sólo desde el punto de vista de los productores culturales, pero también los asalariados cuentan, y mucho. Con los recortes seguramente se perderán bastantes puestos de trabajo. El "presidente del empleo" ya está dejando a muchas personas indispensables para los museos sin chamba. La cultura también afecta otro rubro económico que podría importarles a los economistas: el turismo.En el caso del INAH con los recortes también ponen en peligro irreparable los bienes culturales de la nación. Se ha asignado a una señora Franco que aparentemente defiende la privatización de zonas arqueológicas.

Parece que el gobierno no se quiere echar a la bolsa a los intelectuales y a los periodistas, que aqui en México, por increíble que parezca, si cuentan. Muchos productores y gestores de arte han convocado a una marcha el 19 de este mes, para protestar. Esperemos que tengan éxito, pero las designaciones de los titulares del CNCA, INBA e INAH auguran problemas y vacas flacas para la cultura este sexenio, como para casi todo. Ah si, los diputados y senadores se subieron el sueldo...