Teresa Vicencio Álvarez cometió fraude mientras estuvo al frente del CECUT, pagando un proyecto inexistente al promotor Leobardo Sarabia. Consuelo Sáizar acató, sin quererlo, la decisión presidencial de designar como sucesor de Vicencio a Virgilio Muñoz, acusado todavía de tráfico de personas. Así, señoras y señores, funciona CONACULTA.
Por Juan Carlos Reyna
No hay comentarios.:
Publicar un comentario